El agua es un elemento esencial para la vida en nuestro planeta, crucial en todos los ecosistemas, vital para el sostenimiento y la generación de la vida en el planeta. Sin embargo, el acceso al agua potable es un reto para miles de millones de personas. Se estima que solo el 3% del agua en la tierra es agua dulce y de ésta, sólo una pequeña fracción está realmente disponible como recurso hídrico, ya que gran parte está congelada en los polos y glaciares. El 97% del agua total la contienen los océanos, es salada y no apta para el consumo humano. ¿Sabías que del 3% de agua potable, casi el 70% se utiliza en la agricultura y solo un 20% se destina a uso industrial y doméstico?
Existe una técnica llamada desalinización que permite convertir el agua de mar en agua dulce. El proceso consiste en eliminar la sal del agua usando métodos como la ósmosis inversa. De este modo, el agua puede ser apta para el consumo después de someterla a filtración bajo una alta presión. A pesar de que este proceso requiere una gran cantidad de energía, la desalinización representa una oportunidad para abastecer de agua las comunidades cercanas a las costas.
El Agua es un recurso que actualmente está presente en la vida de todos los seres vivos en todo momento, no pasa ni un solo día sin que tú consumas o utilices el agua, ya sea para lavar, beber o hacer preparaciones en la cocina. Muchos de nosotros damos por sentado que el agua está y siempre va a estar disponible para nosotros. Sin embargo, que bueno contar con información más certera…
¿Sabes realmente cuál es el origen del agua? O ¿De dónde viene el agua?
El agua ha existido en nuestro planeta desde su formación hace miles de millones de años. Y, ¿cómo llega a nosotros? A través del maravilloso Ciclo Hidrológico, el agua se evapora de los océanos, ríos y lagos, se condensa en las nubes y vuelve a caer en forma de lluvia, nieve o rocío. Su naturaleza se compone de tres átomos, dos de oxígeno, que unidos entre sí forman una molécula de agua, H₂O.
¿Cómo valoraban el agua distintas culturas?
Dependiendo del clima y el entorno, la importancia del agua variaba entre diversas sociedades. Mientras que a orillas de los ríos podía darse por sentada, en zonas áridas era un bien preciado que definía el estilo de vida.
A lo largo de los milenios, el agua ha tenido gran importancia cultural y espiritual para las diferentes civilizaciones. La encontramos como motivo central en numerosas mitologías, donde se la relaciona con el origen de la humanidad o con deidades acuáticas protectora de las tribus. En las milenarias culturas del Antiguo Egipto, Mesopotamia y la India, el agua era considerada casi sagrada por su poder fecundante y por su capacidad de dar vida.
La civilización egipcia se desarrolló en las orillas del río Nilo. Hicieron canales y lagunas para aprovechar el agua en cada crecida. En sus orillas se fundaron grandes ciudades, como Babilonia.
¿Está el agua en peligro?
Pese a su abundancia natural, el crecimiento de la población mundial y los patrones insostenibles de consumo amenazan la disponibilidad de agua dulce en muchas regiones.
Según la ONU, en las próximas décadas más de la mitad de la población mundial vivirá en zonas con escasez de agua. Y tal escasez afectará especialmente a regiones de África, Asia sudoccidental y América del sur.
La contaminación del agua y la escasez del agua potable plantea amenazas para la salud humana y el desarrollo de los demás seres vivos del planeta.
Esta contaminación agrava el problema. Casi el 80% de las aguas residuales de los hogares e industrias de países en desarrollo son vertidas sin tratamiento, intoxicando ríos y mares. Estudios revelan que contiene antibióticos, plásticos y metales pesados en muchas reservas.
Además, debido al calentamiento global, hoy muchas regiones sufren sequías más frecuentes e intensas. Para 2025 se calcula que 1,800 millones de personas vivirán en países o regiones con escasez de agua. La sobreexplotación de acuíferos también amenaza el abastecimiento.
El agua es un bien esencial que debemos apreciar. Tomemos verdadera conciencia sobre el valor de este recurso finito que durante miles de años ha dado vida a la humanidad. Cuidar el agua es responsabilidad de todos. Hagamos un uso racional y sostenible de este preciado líquido, de manera que siga disponible para las generaciones futuras.
¿Qué podemos hacer en nuestro día a día para cuidar el agua?
Proteger esta valiosa fuente disminuye el cambio climático, impulsando energías renovables y conservación de bosques. Es vital también asegurar su uso responsable, el agua es un derecho humano que debemos administrar de forma sostenible.
Algunas cosas que podemos hacer para disminuir su consumo y su contaminación son:
Captar el agua de lluvia para riego te permite ahorrar hasta 200 litros por milímetro de lluvia que ha caído.
Para recoger el agua solo debes de poner un balde en el patio de tu casa a cielo abierto, para utilizar el agua que recoja de lluvias en actividades de limpieza o riego.
Desinfectar alimentos con productos libres de químicos.
Al cocinar podemos desinfectar las frutas y verduras con un producto que no contamine el agua que utilizaremos en dicho proceso, en Ecosapiens tenemos un Limpiador de Frutas y Verduras que cumple la función perfecta sin liberar químicos a las fuentes hídricas.
Al cocinar, descongelar alimentos en el refrigerador en lugar de dejar correr agua.
Muchas veces, dejamos que el agua fluya o incluso ponemos vasijas con agua para descongelar alguna comida, lo ideal sería que lo pases del congelador al refrigerador, evitando el uso de agua innecesaria y la generación de bacterias.
Utiliza productos en tu hogar que estén fabricados con materias primas aprovechadas de otras industrias (Aceite de cocina reciclado), que no contaminen el agua y que sean libre de petroquímicos, tenemos varias opciones de Detergentes Ecológicos en nuestra página web.
Riega plantas por la mañana o noche para aprovechar la humedad natural.
Regar las plantas en tiempos en los que el sol es muy intenso, puede ocasionar que el agua se evapore con mayor rapidez, que no se pueda aprovechar sus nutrientes e incluso puede llegar a quemar tus preciadas plantas.
No viertas el aceite por el desagüe. Un litro de aceite contamina 1.000 litros de agua.
Te invitamos a probar nuestra alternativa del Solidificador de Aceite que permite disponer el aceite cocina usado adecuadamente.
Educa a toda la familia sobre el ahorro hídrico para que sea un hábito.
Finalmente, es importante explicarle a tus familiares, amigos y conocidos por qué es importante proteger el agua, para que puedan tener una conciencia ambiental y adoptar hábitos más sostenibles.
Un pequeño esfuerzo tuyo puede marcar la diferencia.
https://www.fundacionaquae.org/historia-del-agua/